Telefónica y Santander se juegan 22.100 millones en Brasil

Brasil ha sido el último ejemplo de otros muchos casos en los que un determinado asunto propicia un fuerte castigo tanto a la confianza de un país como a su divisa. El último (y llevan unos cuantos) ha puesto en la diana a Michel Temer, presidente de Brasil y vicepresidente en la etapa presidida por Dilma Rousseff, ya que el Tribunal Supremo ha autorizado la apertura de una investigación judicial después de que se hayan conocido unas escuchas en las que Temer autorizaba el pago de un soborno para comprar el silencio de un diputado corrupto que podría hablar de ellos a la justicia.

Un suceso que ha provocado un pánico inversor y que ha provocado fuertes oleadas de ventas en la bolsa de San Paulo (sufrió su mayor caída tras la quiebra de Lehman Brothers al retroceder un 8,8%) y en el real brasileño. Una situación que también se ha trasladado a España debido a los fuertes intereses de los ‘blue chips’ y de otras cotizadas en Brasil, llegando a depreciarse el real brasileño un 6,6% frente al euro, tal y como muestra el gráfico inferior.

Cotización euro real brasileño Merca2.es

Esta inestabilidad política que juega en contra de Brasil puesto que tiene potencial para hacer descarrilar la recuperación económica que estaba viviendo el país y una amenaza para los intereses de compañías españolas presentes allí. Pero, ¿realmente se juegan tanto las empresas allí?

La respuesta es sencilla y el tema parece no baladí para las empresas españolas. Telefónica obtuvo durante el año pasado unos ingresos de 11.097 millones de euros en dicho país mientras que el ebitda obtenido en Brasil ascendía hasta los 3.714 millones. Unas cifras muy elevadas y que evidencian el peso del país americano: Un 21,32% de sus ingresos totales y un 24,5% de su ebitda total lo obtienen allí. Una situación bien parecida a de otro de los gigantes de España, como es Banco Santander, que logra en el país un margen de interés y comisiones que se sitúa en los 11.002 millones de euros (26,62% del total) y un beneficio neto de 1.786 millones (21% del total).

Santander obtiene un 26,6% de sus ingresos en brasil mientras que en telefónica suponen el 21,3%

Estas son dos de las compañías más afectadas por la inestabilidad política de Brasil pero no las únicas. Mapfre obtiene en la región un beneficio neto de 114 millones de euros (un 15% del total) y unas primas totales por importe de 4.587 millones (20% del total). Por su parte, las ventas de DIA en Brasil ascienden hasta los 1.856 millones, es decir, obtiene 17,5 euros de cada 100 en dicho país. Abertis es otra compañía presente en el país ya que obtiene un 21% de su beneficio operativo en la región y unos ingresos de 78 millones de euros (14,5% del total) mientras que otras como BBVA, Gas Natural, Gamesa e Indra también tienen presencia allí pero de manera menos significativa y lo aglutinan dentro del grupo de países latinoamericanos.

Por tanto, podríamos señalar que Telefónica, Santander, Mapfre y DIA pueden ver comprometidos los 28.542 millones de euros que obtienen en el país, tanto por la volatilidad que pueda experimentar su divisa como por un posible frenazo de la economía brasileña. Una cifra que adquiere más relevancia si tenemos en cuenta sólo las dos primeras puesto que el montante sería de casi 22.100 millones de euros (22.098).

Marisa Cabrita, analista de Orey Financial, se muestra preocupada con la situación de Brasil ya que “si el actual marco político se deteriora durante un largo periodo de tiempo, entonces la recuperación económica puede ser cuestionada y las empresas brasileñas y extranjeras con exposición al país pueden ser más penalizadas” mientras que Michael Boye, experto en renta fija de Saxo Bank, señala que «si la investigación confirma las acusaciones, parece que el nuevo presidente no es mejor que el predecesor y si no puede permanecer en el cargo, estamos de vuelta a la primera casilla en términos de la agenda de reformas”. Una agenda de reformas que se acometerán en pocos días puesto que el parlamento brasileño debe votar por la reforma del sistema público de pensiones, al que destinará en torno al 45% del presupuesto del país.

Las empresas se preocupan por el riesgo divisa

Un riesgo divisa que puede ser compensado a través de distintas coberturas. Una encuesta, llevada a cabo por la consultora EY y el instituto IEB, como es la “Encuesta de Gestión de Riesgo de Tipo de Cambio a Empresas Españolas”, muestra como para el 61% de las empresas encuestadas la exposición al riesgo de tipo de cambio es una preocupación alta o media-alta. Es por ello, que el 84% de las empresas cuenta con una política definida de gestión del riesgo de tipo de cambio, a través de la utilización de derivados (46% de las empresas) con los que cubren sistemáticamente en torno al 50% de la exposición, siendo los más empleados el forward de divisas o seguro de cambio (76%). Aun así, hay a quien parece no preocuparle dicho problema y no optan por cubrirse: El 19% de las empresas no cubre nada con derivados e intenta aprovechar coberturas naturales mientras que un 9% afirma que traslada el riesgo al cliente o proveedor.

El 19% de las empresas no cubre nada con derivados

Aun así, las compañías se enfrentan a numerosos retos en la gestión del riesgo de tipo de cambio. Entre ellos destacan: 1) establecer un objetivo claro para la gestión del riesgo de tipo de cambio, 2) mejorar la información financiera para la toma de decisiones de gestión, 3) entender cuál es la exposición real al riesgo de tipo de cambio y 4) mejorar los sistemas y herramientas de gestión.

retos Merca2.es

 

Además, el estudio es de gran utilidad puesto que la zona geográfica a la que más están expuestas las empresas de la muestra es Latinoamérica (un 73% de las empresas tiene algún tipo de exposición a esta zona) y la moneda latinoamericana a la que las empresas tienen más exposición es el real brasileño (33%). Por tanto, la marcha de la economía brasileña no sólo afectará a las cotizadas señaladas anteriormente sino también a otras de mediano y pequeño tamaño. Aun así, el real brasileño no sería la divisa principal puesto que la moneda a la que más están expuestas las empresas, con gran diferencia, es el dólar estadounidense (el 85% de la muestra tiene exposición a esta moneda) debido al hecho de que se utiliza como moneda de intercambio internacional en numerosas geografías que no son la estadounidense.

El 73% de las empresas tiene exposición a Latinoamérica

Por último, el estudio realiza una pregunta interesante como “¿cuál es el objetivo principal de la gestión del riesgo de tipo de cambio?” y que muestra como la gran mayoría (70%) lo hace para proteger el resultado en los estados financieros consolidados mientras que un 46% lo hace también para proteger los flujos de caja futuros con relación a la moneda de referencia de la matriz.

EY objetivo Merca2.es