Reciclaje frente al covid-19: la segunda vida de las mascarillas

La acuciante necesidad de mascarillas es inabarcable. La mayoría son además de un sólo uso. Aventurarse a cifrar el número de las que se necesitan a diario resulta arriesgado. Para los profesionales de la Sanidad, de la Farmacia, de la Industria alimentaria, de la Distribución o del Transporte, son de uso obligatorio. Pero cada vez son más los ciudadanos que buscan asegurar sus breves salidas al exterior con una cobertura facial. Por eso, cada día, la necesidad de mascarillas se actualiza y se amplia, y no hay oferta capaz de cubrir esa demanda. En un mercado saturado, la economía circular ofrece una solución pragmática y eficiente. Ahora reciclar mascarillas y facilitar una segunda vida a estos objetos responde más a una urgencia sanitaria que a un compromiso ambiental.

A los productores de mascarillas en España y del mercado internacional se han unido, con motivo de la crisis por el covid-19, muchas empresas de otros sectores que han transformado su cadena productiva para fabricar material sanitario. Además a la oleada de producción masiva de mascarillas se han sumado iniciativas particulares sin fines lucrativos para aportar su granito de arena. Pero, aunque son muchos los esfuerzos no resultan suficientes. Por eso, el proyecto empresarial gestado en Asturias para el reciclaje de más de medio millón de mascarillas al día para personal sanitario aporta, no solo un incremento en el número de unidades disponibles, sino la confirmación de que los nuevos modelos en el marco de la economía circular son viables y eficaces.

Asturias acaba de poner en marcha el reciclaje masivo de mascarillas para uso sanitario. Más de una docena de empresas, lideradas por Bioquochem, Therman y Olmar, han permitido superar las expectativas iniciales y recuperar más de 500.000 unidades al día. La alianza empresarial pretende distribuir de forma gratuita este material, fundamental para la protección contra el covid-19, a centros de toda España, siguiendo las indicaciones de las autoridades sanitarias.

El proyecto Spain (Sistema Presurizado Antiséptico Industrial y Neutro), como lo han bautizado sus promotores, tiene su origen en la firma Bioquochem, encargada de diseñar inicialmente el proceso de higienización y esterilización. A esta iniciativa, apoyada desde el Gobierno de Asturias, se han sumado de forma altruista dos compañías de Gijón: Therman, que ha puesto a disposición sus conocimientos, su fábrica y su personal para la esterilización de las mascarillas y el empaquetado, y Olmar, que realiza la fase final de esterilización. Y aunque el proyecto está planteado para una producción que ronda el medio millón diario de mascarillas, existe capacidad para aumentarla hasta el millón de unidades al día.

Inicialmente el trabajo ha comenzado con las mascarillas recogidas por el Servicio de Salud del Principado (Sespa) para su reciclaje, pero los promotores animan a todos los hospitales y personal sanitario a que comiencen con la segregación adecuada de las mascarillas quirúrgicas usadas, en bolsas y contenedores separados del resto de residuos hospitalarios. Además, solicitan la colaboración de los usuarios, ya que es muy importante que las mascarillas no se rompan durante la retirada del rostro. También han contactado con otras regiones para que puedan enviar estos dispositivos usados y proceder a su reciclaje.

El Consejero de Ciencia, Innovación y Universidad, Borja Sánchez, que visitó las instalaciones de Therman, explicaba que la certificación del organismo notificador demuestra que «los tratamientos que se aplican a las mascarillas no alteran el producto original, sobre todo, en término de barrera microbiológica».

El objetivo es dotar de mascarillas a los centros que lo necesiten en toda España, para lo que se pedirá la colaboración de empresas de fuera de la Comunidad Autónoma y se contará con las instalaciones que Therman posee en Huelva, Montilla, Sant Andreu de la Barca, Puertollano y Fátima, en Portugal, y la cesión de espacios para este proyecto por parte de la empresa Macoga en Órdenes (A Coruña) y MDA (Mecánica del Aire, S.L.) en Valencia.

La iniciativa precisa, además, de personal voluntario para poder proceder al empaquetado y distribución, que se gestionará a través de la web www.proyectospain.com

El proyecto cuenta con la colaboración desinterasada de firmas como Normagrup, Inoxnalón, Tecnoenvases Álvarez, Asturiquimia, Proquiman, Inmicrosa, Ibersa, Grupo Ulma Packaging y Bartusol. Además, contribuyen la Asociación de Investigación de Industrias Cárnicas del Principado (Asincar) e Idonial y la Universidad de Oviedo, así como la Delegación del Gobierno en Asturias, el Ejército y la Guardia Civil.

María Castañeda
María Castañeda
Redactora de MERCA2 de empresas y economía; especializada en energía, sostenibilidad y turismo.