¿Qué papel juegan Eduardo Inda y Jaume Roures en los líos de Juan Carlos I?

Las cartas se pusieron boca arriba y pintaron bastos para el Rey Juan Carlos I, al que unos audios comprometedores de su entrañable amiga Corinna le han aguado el que iba a ser un año de homenajes por su 80 cumpleaños y por el 40 de la Constitución. Cuentan las malas lenguas, que son todas, que detrás de la exclusiva publicada por El Español y OK Diario se encuentra José Manuel Villarejo, controvertido ex comisario que desde la cárcel estaría sediento de venganza porque se agotó su inmunidad tras décadas de juegos sensibles y negocios al por mayor.

Las cintas revelan que Juan Carlos I habría pretendido que su ex entrañable Corinna, con la que barajó casarse, le devolviese la fortuna tras haberla utilizado como testaferro de sus presuntas fechorías. La supuesta princesa afirma en las cintas que no quiere cometer delitos de blanqueo, aunque la siempre bien informada Ana Romero, espía del CNI según la exclusiva del año, afirmó este sábado en TV3 que estas conversaciones son una película de espías guionizada y realizada por Villarejo, enemigo público de Félix Sanz Roldán, que no tendrá más remedio que pasar por el Congreso para salvar el trono del CNI.

Cierto es que a las afueras de la ciudad resuena la metralla, pero mientras el PSOE se pone de perfil, el PP y Ciudadanos están en sus cosas y en Podemos y los nacionalistas se frotan las manos ante tanta porquería.

LA GUERRA DE LOS DIGITALES

OK Diario ya publicó el pasado año una información que decía que el CNI pagó con fondos reservados el silencio de otra entrañable, Bárbara Rey. El diario dirigido por Eduardo Inda ahora ha repetido jugada. Al periodista navarro se le ha situado en múltiples ocasiones en la esfera de Villarejo, que tanteó incluso llamarle como testigo de unos de sus juicios. Inda no entró al trapo, pero en varios autos judiciales se evidenció que la cercanía entre ambos personajes era evidente.

Cierto es que esta supuesta amistad no invalida ni una sola de las pruebas aportadas por OK Diario, firmadas todas ellas por Manolo Cerdán, ex compañero de redacción en Interviú del que las firma en El Español, Daniel Montero, que se encargó de uno de los negocios de Villarejo, el portal Información Sensible.

Ahora ambos periodistas, desde las trincheras virales de Ramírez e Inda, han compartido la publicación al alimón un serial por entregas que daña los cimientos de la Casa Real, donde atrona un aterrador silencio. Mirando de forma suspicaz a este culebrón se encuentra Público, cuyos responsables del equipo de investigación, Carlos Enrique Bayo y Patricia López, han apuntado contra Inda y Villarejo en varias ocasiones y cuyo jefe, Jaume Roures, firmó de su puño y letra el documental ‘Las cloacas de Interior’, donde señalaba a una trama mediático-político-policial que utilizaba métodos de la mafia para derribar a enemigos políticos y hacer negocios.

Público ayer volvía a la carga y apuntaba a OK Diario como responsable de haber publicado con anterioridad para apoyar la excarcelación de Villarejo, señalando los objetivos que el ex comisario «piensa que han contribuido a que fuera detenido e imputado por blanqueo de capitales: el comisario Marcelino Martín Blas, los agentes de Asuntos Internos, el empresario Jaume Roures o los periodistas de Público, al ser testigos en la causa del pequeño Nicolás en la que también está imputado».

En esta particular batalla también juegan sus cartas los periódicos de papel, que guardan un riguroso silencio salpimentado con alguna ocurrencia exculpadora, y las televisiones privadas, que en líneas generales han informado sin cortapisas, con La Sexta y Telecinco a la cabeza.