Existen muchos pueblos ideales para hacer una escapada rural. Los tienes en todos los puntos cardinales del mapa de España. Pero solo algunos de esos pueblos pueden presumir además de estar amurallados. Esos grandes muros de antaño le dan un toque mucho más medieval, mucho más fantástico, como los que aparecen en algunos cuentos de hadas, o películas de épocas pasadas.
Además, el enclave natural donde se encuentran permiten que puedas salir para estar en contacto con la naturaleza, visitar bosques, montañas, lagos, ríos, etc. Perfectos para salir de la rutina, relajarse y practicar actividades de todo tipo al aire libre, desde paseos a caballo, bici de montaña, senderismo, algunos deportes náuticos, o simplemente pasear tranquilamente y respirando aire puro.
Pueblos amurallados para una escapada rural
Alarcón, Cuenca
Alarcón es el primero de los pueblos amurallados ideales para hacer una escapada rural. No hay más que ver su entorno para saber que estás en el lugar adecuado para encontrar la calma y disfrutar de todo lo que te ofrece, tanto dentro del propio pueblo como fuera.
Se encuentra en cuenca, enclavado en unos montes en las hoces del río Júcar. Un lugar que fue ocupado por romanos y visigodos. Cuando fue invadido por los árabes se levantaría su castillo, y en 1184 pasaría a manos cristianas.
Allí vivió el marqués de Villena, y el infante Don Juan Manuel escribiría algunas de sus obras en este lugar. Todo eso puedes revivirlo y sentirlo si te decides a visitar todo lo que aún se conserva de aquellas épocas gloriosas…
