Una promoción de 650 viviendas en Madrid convertida en un basurero

Proyectos fugaces, aprobaciones de planes que no llegan a buen puerto y la inoperancia de las administraciones públicas han terminado por generar un déficit de 650 viviendas en el distrito de Carabanchel, uno de los más humildes de Madrid. Un superficie de 172.000 metros cuadrados que lleva diez años abandonado y que no cesa de acumular basura y escombros.

MERCA2 ha publicado la situación que se ha generado en el solar donde hace diez años se erigía la antigua cárcel de Carabanchel. Desde que el centro penitenciario cerrara sus puertas a finales del siglo XX, la superficie de 172.000 cuadrados ha sufrido un deterioro continuado, hasta que en el año 2008 se acabó con el derribo del edificio. Han transcurrido diez años -este 25 de octubre se cumple el décimo aniversario de la demolición- y la zona continúa sin las 650 viviendas y sin el hospital que se había proyectado en un plan parcial, aprobado por el Ayuntamiento de Madrid.

Para explicar esta situación es necesario recalcar que el terreno no pertenece al consistorio madrileño, sino al Siepse (Sociedad de Infraestructuras y Equipamientos Penitenciarios), perteneciente al Ministerio del Interior. Por tanto, la responsabilidad final es del Gobierno Central. Durante este tiempo -desde 1999- por la presidencia del Ejecutivo ha pasado el PP y el PSOE, pero ni los ‘populares’, ni los socialistas han logrado arreglar un problema que ha generado un ‘agujero’ de 172.000 metros cuadrados en el corazón de Carabanchel. Este distrito -al sur de la capital- es el cuarto con la renta bruta más baja de Madrid, sólo superado por Usera, Puente de Vallecas y Villaverde.

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En todo este tiempo son muchas las ideas que han surgido al rededor de este terreno, aunque la principal -crear un espacio para la memoria histórica- fue desechada por una comunista, Mercedes Gallizo, presidenta del Siepse -del año 2004 al 2011 y desde julio de 2018 a la actualidad-. Tras ver fracasar este proyecto, los vecinos de la zona volcaron sus esfuerzos en dotar a la zona de servicios públicos, pero lo único que consiguieron es la proyección de un hospital y de algún centro escolar. Además, un CIE (centro internamiento de extranjeros) y una comisaría completaban la dotación pública del Plan Parcial de Reforma Interior (APR 11.01 Cárcel de Carabanchel).

Crece la basura y los escombros en un solar de 650 viviendas fantasma.
Escombros en el solar de Carabanchel.

En este proyecto -aprobado por el Ayuntamiento de Madrid , según las memorias anuales del Siepse (propietario del terreno) del año 2016- también se contemplaba la construcción de 650 viviendas. De estas, un 30% eran destinadas a VPO (vivienda de protección ofical). O lo que es lo mismo, 195 hogares de las 650 planificadas. El problema es que dos años después de que se aprobara el plan, según la versión del propio Siepse, no se ha construido nada y lo que es peor, no hay noticias de que vaya a ocurrir en un futuro cercano.

“El tema sigue igual, en el mismo estado que en el texto reflejado en las memorias anuales del año 2016. Los complejos urbanísticos son muy complejos y arduos». Esta es el razonamiento del Siepse para explicar el retraso en el proyecto. Mientras tanto los vecinos de la zona lamentan la falta de información al respecto. «No tenemos ni idea de qué va a pasar con el solar y ya han pasado diez años desde que se derribó la cárcel», afirma Jesús Rodríguez, miembros de la asociación Salvemos Carabanchel. Un vecino que también recela de la construcción de las viviendas: «No nos fiamos y tememos que especulen con ellas».

Crece la basura y los escombros en un solar de 650 viviendas fantasma.
Imagen aérea del solar de Carabanchel.

Desconfianza vecinal de un lado, la realidad es que Madrid tienen una necesidad alarmante de viviendas de nueva construcción. La proliferación de los pisos turísticos, la ausencia de de obra nueva y el aumento de población han significado un incremento del precio del alquiler. De hecho, algunos expertos afirman que ya existe una burbuja en el arrendamiento de viviendas en la capital y El Gobierno Central ya ha comenzado a plantear algunas medidas para regular esta actividad.

De todos modos, para ‘pinchar’ este pseudo burbuja es necesario aumentar la oferta, es decir, construir nuevas viviendas, según todos los agentes implicados en el conflicto. Por este motivo es un ‘lujo’ que Madrid tenga un solar de 172.000 cuadrados sin aprovechar, en uno de los barrios más humildes de la capital.

UNA BATALLA EN LA QUE NINGUNO GANA

Además, en esta contienda pierden todos: la Administración, los vecinos y los habitantes de la capital. El Gobierno deja de ingresar dinero en las arcas por la venta del solar, los residentes de la zona dejan de disfrutar de las dotaciones públicas y los madrileños que no pueden optar a una de las 650 viviendas proyectadas. Unos hogares que según una tasación online en Housfy de las promociones que colindan con el solar tendrían un valor de entre 1.800 euros y 2.300 euros el metro cuadrado. JLL eleva el precio para este barrio y lo sitúa entre 2.600-3.000 euros el metro cuadrado. Idealista es más conservador y tasa el metro cuadrado en 2.000 euros de las viviendas que colindan con este solar.

Pero todos estos números no son más que castillos en el aire. Porque la realidad del solar y el futuro cercano del mismo no es la construcción de viviendas, un hospital o un colegio, sino la acumulación de basura y el vertido de residuos incontrolados. De hecho existen fotos que demuestran el deterioro y la dejadez del terreno, que incluso se ha convertido en un ‘picadero’ para los más jóvenes. Madrid llora por la falta de viviendas, mientras en Carabanchel yace un solar abandonando de 172.000 metros cuadrados.