Los políticos españoles tensionan (y enfangan) la despedida del carbón

El carbón tiene fecha de caducidad. En España y en todos los lugares del mundo. Ahora bien, la denominada transición energética se puede hacer de una manera rápida y sin dolor; o prolongando la ficticia situación de generar una energía barata y luego llevarse el susto de golpe.

En este sentido se proyecta el último informe presentado por Economics for Energy que presenta un escenario de descarbonización para el año 2030 bajo los criterios marcados por las actuales directrices en lo relativo al recorte de emisiones, y además plantea cuatro escenarios de futuro de cara al 2050 en función de cómo se plantee en España dicha transición (descarbonización total, continuidad con las políticas actuales o avance tecnológico…).

Sobre las consideraciones generales del informe cuyo título es ‘Escenarios energéticos para España 2030-2050‘, estiman que, aunque la senda de reducción de emisiones puede ser coherente con un escenario más ambicioso de descarbonización para 2050, como el previsto por la Unión Europea, las inversiones requeridas para alcanzar estos objetivos pueden no serlo.

[td_block_11 custom_title=»» separator=»» post_ids=»39986″ limit=»1″ css=».vc_custom_1496993590403{border-top-width: 1px !important;border-right-width: 1px !important;border-bottom-width: 1px !important;border-left-width: 1px !important;padding-top: 5px !important;padding-right: 5px !important;padding-bottom: 5px !important;padding-left: 5px !important;border-left-color: #000000 !important;border-left-style: solid !important;border-right-color: #000000 !important;border-right-style: solid !important;border-top-color: #000000 !important;border-top-style: solid !important;border-bottom-color: #000000 !important;border-bottom-style: solid !important;border-radius: 4px !important;}» tdc_css=»»]

Así, el think-thank, del que son socios grupos energéticos como Gas Natural Fenosa o Iberdrola y compañías como Inditex, Banco Santander, Acciona, Alcoa o Ferrovial, entre otros, señala que el cumplimiento de los objetivos de descarbonización establecidos para 2030 «no va ser muy complejo», aunque advirtió de que sí que puede ocurrir que a partir de ese horizonte se cuente con energía fósil que «no se va a usar, ya que se quiere descarbonizar», como es el caso de los ciclos combinados.

Aunque sin duda, el escenario más preocupante que expone de los cuatro Economics for Energy es el cuarto, que plantea que se produzca un estancamiento económico a largo plazo y una menor capacidad de innovación, todo ello como consecuencia de un contexto político inestable. Algo que, ahora mismo, pilla a España de lleno.

Rajoy pega su puntilla sobre el carbón

El escenario cuarto plantea que en 2050 todavía existe una fuerte dependencia de los combustibles fósiles y la contribución de las renovables es muy limitada. Y, a tenor de las declaraciones públicas que hace el presidente del Gobierno español, parece que no va muy desencaminado.

Mariano Rajoy garantizó esta semana en París, durante una cumbre climática, que España cumplirá los compromisos «exigentes» contraídos con el acuerdo contra el cambio climático suscrito hace dos años en la capital francesa, aunque precisó que la transición energética no se puede hacer de repente.

[td_block_11 custom_title=»» separator=»» post_ids=»39016″ limit=»1″ css=».vc_custom_1496993590403{border-top-width: 1px !important;border-right-width: 1px !important;border-bottom-width: 1px !important;border-left-width: 1px !important;padding-top: 5px !important;padding-right: 5px !important;padding-bottom: 5px !important;padding-left: 5px !important;border-left-color: #000000 !important;border-left-style: solid !important;border-right-color: #000000 !important;border-right-style: solid !important;border-top-color: #000000 !important;border-top-style: solid !important;border-bottom-color: #000000 !important;border-bottom-style: solid !important;border-radius: 4px !important;}» tdc_css=»»]

Así, tras respaldar que España siga dando los pasos necesarios para una mayor dependencia de energías limpias, subrayó: «No podemos suprimir el carbón de un día para otro«. Rajoy ha añadido que, de la misma forma, tampoco otros países pueden suprimir de manera drástica su dependencia de las centrales nucleares. Si otros no lo hacen, nosotros para qué -pensará-. Por ese mismo motivo, y bajo ese escenario de inestabilidad política, también desde el Gobierno se encargan de prender la mecha siempre que pueden.

El ministro Nadal acusando

Por si no fuera complejo la meta de alcanzar emisiones no contaminantes cero, el fango político sigue a lo suyo. Sin ir más lejos, esta misma semana el ministro de Energía, Álvaro Nadal, ha escrito un Twitter un mensaje con múltiples destinatarios. Y a todos les ponía la diana en el pecho.

Al margen del rejonazo a Iberdrola, sobre todo, Nadal también tira con la falta de entendimiento político. En este caso mira hacia PSOE y Ciudadanos, donde no ha encontrado apoyos para el asunto de las centrales eléctricas y los cierres planteados por las compañías. Por ello, y en un juego de malabarismo, acusa a unos de no estar en el mismo barco para convencer a los otros de lo que es necesario.

Todo un juego político que, entre otros cosas, ha dejado a España fuera del último gran pacto para cerrar el grifo del carbón lo antes posible. Aunque después de la intervención de Mariano Rajoy en París, parece que el escenario cuatro del informe gana enteros.

Raúl Masa
Raúl Masa
Ex Coordinador de redacción y redactor de empresas y economía; especializado en telecomunicaciones, tecnología y energía.