La política de Ferrovial abre la puerta a cambios en Heathrow

Fue en octubre de 2012 cuando Ferrovial vendió un 5,72% de Heathrow a Stable Investment Corporation por 257,4 millones de libras (unos 319,3 millones de euros). Al año siguiente, y en el mismo mes, hizo lo propio con otro 8,65%. Entonces, el comprador fue el fondo de pensiones del Reino Unido Universities Superannuation Limited (USS). Pagó 392 millones de libras (unos 463 millones de euros).

Desde entonces, el porcentaje de Ferrovial en Heathrow ha permanecido inalterable: 25%. Una posición jugosa que le había reportado interesantes dividendos. Junto con el resto de infraestructuras aeroportuarias, por ejemplo, en 2014 significaron 341 millones de euros para las arcas de Ferrovial en dividendos. O los 237 millones de 2017. Durante 2019, la cantidad fue de 254 millones, de los que 145 correspondieron a Heathrow. Sin embargo, este año, esa cantidad se quedará en unos escuetos 29 millones de euros. Y, para 2021, quedará a cero. ¿Es el momento de abrir la puerta a nuevas ventas en Heathrow?

“Las empresas con intereses puestos en aeropuertos podrían tomar medidas para rentabilizar sus inversiones”, señala Diego Morín, analista de IG. De hecho, Ferrovial está negociando un plan urgente para salvar Heathrow en el que la revisión de las tarifas está sobre la mesa. Conviene recordar que la infraestructura ha sufrido una caída de pasajeros del 72,6%. Por sus instalaciones pasaron 80.957.272 pasajeros en 2019. En 2020, esa cifra menguó hasta los 22.109.726 pasajeros.

INCONVENIENTE PARA FERROVIAL

Vender ahora en Heathrow tendría un grave inconveniente para Ferrovial: el precio sería inferior a cualquier otro momento en el que el tráfico fuera previsiblemente mayor. Aunque si la pandemia persiste, y Heathrow no levanta el vuelo (nuevas variantes del virus, restricciones de movilidad…), Ferrovial podría tomar otras medidas.

“No se espera una recuperación de la demanda de vuelos hasta bien entrado el año 2022”, añade Diego Morín. Ferrovial, y el resto de accionistas, de momento, han recurrido a diferentes mecanismos de refinanciación intragrupo para aportar unos 850 millones de euros para mantener la operativa de Heathrow.

Según Bankinter, la revisión de tarifas en el aeropuerto londinense sería una buena noticia para Ferrovial. Entre otras razones, porque supondría acelerar la recuperación de las pérdidas provocadas por la pandemia, el reequilibrio de su balance, y la devolución del préstamo de 850 millones de euros a los accionistas. “La decisión todavía está en el aire y le damos una probabilidad de éxito baja”, resaltan en la entidad financiera. Otro motivo para pensar en cambios.

APUESTA POR LOS VERTIPUERTOS

Mientras tanto, la política de Ferrovial tiene nombre propio: vertipuertos. En Estados Unidos construirá una decena. En España, serán una veintena. Atrás ha dejado el interés por aeropuertos como el de Prestwick, en Glasgow (Escocia). Y sufrió el varapalo del aeropuerto de Denver, en EEUU, que rescindió el contrato para remodelar la terminal.

Para Ferrovial, no está sobre la mesa vender en Heathrow. Amén de los dividendos, se trata de una inversión estratégica que permite mantener a la compañía el know how y posicionamiento para invertir en otros aeropuertos fuera del Reino Unido.

Ferrovial lo dejó claro en la presentación del Plan Horizon 2024. Pero, por aquel entonces, la pandemia no había azotado de manera brutal al turismo, en general, y a los aeropuertos, en particular. Además, la venta de la división Servicios está alargándose más de lo inicialmente previsto.

Ante esta situación, la ampliación de la tercera pista de Heathrow, aprobada tras la autorización del Tribunal Supremo, podría ser un soplo de aire fresco. Aunque es posible que no arranque hasta dentro de dos años. A nivel de liquidez, le viene bien a Ferrovial porque retrasaría las inversiones. En junio del pasado año, Ferrovial vendió el 5% de su filial de construcción en Polonia por 57 millones de euros: Budimex.