Figueruelas se despide del Opel Mokka tras más de 300.000 unidades

La factoría del Grupo PSA en Figueruelas (Zaragoza) ha ensamblado este viernes su última unidad del Opel Mokka X tras cinco años y 315.621 coches salidos de esta planta aragonesa.

Opel anunció que el Mokka X se iba a fabricar en Europa, además de en Corea, el 10 de julio de 2013. El centro de producción elegido fue la planta zaragozana de Figueruelas. De esta manera, en septiembre de 2014 la marca inició la producción en serie de este vehículo en la línea 1 de la factoría.

Opel decidió fabricar este vehículo en Figueruelas debido al éxito comercial que tenía en Europa. El objetivo era que la compañía fuese capaz de responder con rapidez a los pedidos de los clientes y ajustar la sobrecapacidad de las plantas de la firma en el continente. Por ello, los principales países de destino de los coches que han salido de Zaragoza han sido Alemania, Italia, España, Francia, Bélgica y Turquía.

Desde 2014 hasta este 28 de junio han salido de Figueruelas 315.621 unidades de Opel Mokka, el último de ellos la tarde del viernes. De este modelo se han estado ensamblando 180 unidades diarias y, en concreto, se producen 2.200 coches cada día de la planta.

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EL FIN DEL OPEL MOKKA NO AFECTA A FIGUERUELAS

El fin de la fabricación del Mokka en Figueruelas ya estaba anunciado desde que se iniciase su producción. Esto se debe a que estaba pensado como un modelo de transición para la planta hasta la llegada de nuevos modelos en la línea 1.

Estos nuevos modelos fueron el Crossland X y C3 Aircross, que se fabrican en la planta zaragozana desde 2017. Así, la línea 1 queda cubierta y, por tanto, el sustituto del Mokka no se ensamblará en Zaragoza.

En este contexto, la marcha del Mokka tampoco supondrá que la factoría del Groupe PSA produzca menos. Con la asignación del nuevo Opel Corsa y su versión eléctrica, así como el buen ritmo de los SUV, Citröen C3-Aircross y Opel Crossland, Zaragoza tiene actividad asegurada y un volumen de producción importante para los próximos años. Aunque, evidentemente, todo depende de la aceptación que tengan los vehículos en el mercado y del contexto social, económico y político.

La llegada del Mokka a Figueruelas supuso un reto para la planta, ya que se lanzó en tiempo récord –en menos de un año desde el anuncio–. Además, se trabajó por primera vez con un centro de desarrollo de Corea, cuando la factoría zaragozana lo hacía normalmente con el de Alemania.

Para el equipo logístico, este lanzamiento también fue un reto importante, ya que, junto con su proveedor experto en transporte y logística GEFCO, estuvieron un año preparando la administración estratégica de la cadena de suministro, el diseño de la arquitectura logística, el sistema de informaciones que se aplican a estos procesos integrados, planificando las rutas y estrategias ‘in-bound’ para traer desde Corea las piezas que componen el modelo.

De esta forma, diseñaron una compleja cadena logística para asegurar el suministro continuo de subcomponentes a planta. Así, se cumplió el objetivo de mejora del tiempo de entrega a los clientes.

Además, el Mokka y la quinta generación del Corsa, que empezó a producirse en noviembre de 2014, supusieron que más de mil personas que en 2013 estaban sin trabajar, total o parcialmente, volvieran al trabajo. Gracias a esta circunstancia, no ha habido más expedientes de regulación de empleo suspensivos en la factoría desde julio de 2014.

«El Opel Mokka ha sido fundamental para mejorar los volúmenes de producción y tasa de utilización de nuestra capacidad de producción en un momento complicado de sobrecapacidad en Europa. Fue para la planta de Zaragoza un elemento de motivación, ya que nos permitió ver el futuro con mayor positividad y desde luego una gran prueba para la plantilla que se superó con éxito«, han indicado fuentes de la compañía.

El Opel Mokka X estará disponible en los concesionarios hasta final de año y su sustituto se lanzará al año que viene.