Nace Think Cat: el constitucionalismo se rearma desde fuera de la política

A estas alturas de la película, y en los días previos a que la ofensiva separatista se manifieste en toda su extensión en Cataluña, es más que evidente que el llamado procés ha generado un conflicto en la sociedad catalana cuyas consecuencias todavía hoy son imprevisibles. La fractura social es incuestionable y alcanza incluso al seno de muchas familias, y que no decir de grupos de amigos, lugares de trabajo, etcétera.

Pero no solo eso… En términos políticos está teniendo un coste muy elevado, e incluso los partidos llamados constitucionalistas se han visto afectados por fuertes tensiones internas. Es la situación que viven tanto el PSC como el PP y Ciudadanos, aunque es cierto que el primero parece recomponerse de las heridas que le ha provocado una tensión incluso más fuerte en la medida que una parte de su electorado se identificaba con el independentismo.

Pero una vez que ese electorado ha abandonado las siglas socialistas para engrosar las de ERC, el partido que lidera Miquel Iceta es el que se encuentra en mejor situación para abanderar una posición de rechazo al independentismo desde la comprensión a la complejidad catalana. Eso, que también lo ha entendido Inés Arrimadas, tiene sin embargo detractores en el seno de Ciudadanos, por lo que ese partido vive en medio de una tormenta.

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Y no digamos el PP, con un líder antipático que genera un rechazo casi existencial en Cataluña y que puede acabar siendo totalmente marginal. Con ese panorama, desde fuera de la clase política se están buscando alternativas, y así, con la vista puesta en lo que pasará a partir del 2 de octubre, es decir, el día después del referéndum, el próximo mes de septiembre se va a presentar en Barcelona Think Cat.

¿Qué es Think Cat? Pues nada menos que un think tank con fuertes apoyos empresariales y políticos, en el que habrá gente de todas las tendencias del constitucionalismo e, incluso, del nacionalismo moderado que no quiere romper con España -Josep Piqué y Josep Borrell actuarán de padrinos-, y cuyo objetivo es buscar una tercera vía de solución al problema catalán y obligar a los partidos, y especialmente al Gobierno de Mariano Rajoy, a mover ficha. Seguiremos informando.