Lo que no cuentan del coronavirus: Madrid ya supera los 10.000 infectados

Fernando Simón, el hombre del coronavirus, se ha convertido en la versión moderna del ‘parte’. Al igual que entonces, sus palabras son la versión oficial de la guerra que se libra frente al Covid-19. Infectados, hospitalizados y muertos componen el desangelado discurso que llega cada día a los hogares. Una información que, sin embargo, cada día menos gente se cree. Y no es para menos. En realidad, las mismas herramientas matemáticas que se han utilizado para confinar a la población española en sus casas, entre comillas, sirven para desmentir las cifras oficiales. En especial en Madrid, donde el número de infectados ya supera los 10.000, y probablemente con bastante margen.

Pero, para llegar a la cifra real estimada en Madrid hay que seguir un largo recorrido. El elemento central de todo estudio es la recogida de datos. Una vez se han obtenido una cifra importante de ellos, a más volumen más certeza, los podemos tratar para encontrar patrones numéricos como la tasa de mortalidad o contagio. En un primer momento, dichos cocientes pueden variar, obviamente, pero a la larga tienden hacía un mismo punto gracias a una de las herramientas más potentes (teorema fundamental) que hemos descubierto: La ley de los grandes números.

Una vez conocemos las herramientas, procedemos con los datos. Primero, accedemos a los de todo el mundo, puesto que a mayor volumen menor error medio. Los últimos datos conocidos arrojan una cifra de 200.000 infectados, en 162 países, y 8.000 muertes. El cociente entre ambas (multiplicado por 100 para el porcentaje) se obtiene que la tasa de mortalidad se acerca al 4%. Si retrocedemos una semana, al 11 de marzo, la misma tasa estaba en el 3,6%, por lo que la dispersión empieza a converger. Ahora, podemos comparar esas cifras con España: el 11 de marzo, la tasa era del 2,24%, y el 18 de marzo del 4,06%. En definitiva, se ve que con tiempo (el virus sigue una lógica temporal) y más datos se cumple la Ley de los grandes números.

EN MADRID LAS CIFRAS NO CUADRAN

En el estudio económico, que se basa mucho en la teoría de la probabilidad, se estudian magnitudes hasta que una sobresale. Para bien o para mal. Eso es lo que ocurre con la capital del país. La tasa de mortalidad en Madrid que debería estar en línea las anteriormente señaladas, ya que más casos ofrecen más datos (y menos error), es un 57,5% superior a la que se registra en todo el mundo. En concreto, en la comunidad autónoma el índice es de 6,3 muertes por cada 100 infectados, frente a los cuatro fallecidos por cada 100 a nivel global.

Tras descubrir la anomalía se hace la pregunta: ¿Por qué en Madrid es más alta? A lo que sigue la aportación de distintas hipótesis y su posterior estudio. Entre las alternativas están que en la CCAA haya más población de riesgo, que los servicios sanitarios sean peores o que los datos no sean los correctos. La primera, la podemos descartar, puesto que la edad media son los 42,35 años, según el INE, lo que la sitúa entre las cinco más bajas y con diferencia frente a Asturias (48,8 años) o Castilla y León (47,5 años). Por otro lado, la sanidad madrileña no solo es de las mejores de España, sino que del mundo (mal le pese a muchos), según el índice publicado por The Economist. También descartada.

La eliminación de ambas hipótesis nos lleva hasta la tercera. Pero, a su vez abre una nueva vía: se ha infravalorado los datos de infectados o sobrevalorado las muertes. Obviamente, la segunda no es, dado que los fallecimientos son los que son. En el caso de la primera, observamos que el crecimiento difiere mucho: así, entre el 9 y el 12 de marzo el número de infectados creció de media al 45%. Pero, entre el 16 y el 18 solo lo ha hecho al 16%. Lo que nos indica que la Comunidad de Madrid no informa realmente de los positivos que tiene, sino de los que es capaz de hacer test que son unos 700. El tratamiento coincide la declaración del Gobierno autonómico de dejar de hacer test hace una semana.

MADRID SUPERA LOS 10.000 INFECTADOS

Con todos los datos encima de la mesa, podemos estimar el número de infectados que hay en la Comunidad de Madrid. En realidad, el procedimiento (al menos, grosso modo) es bastante sencillo. Simplemente, tomamos las muertes declaradas, de la que nos podemos fiar, que ascendieron a 390 y las dividimos entre la tasa de mortalidad normal (del 4%). La solución es que el número de casos de coronavirus en la Comunidad de Madrid se acerca a los 9.800 el miércoles 18 de marzo. Una cifra muy cercana a la barrera psicológica de los 10.000 que ya se ha superado, ampliamente, este mismo jueves día 19.

Para más seguridad en la cifra, podemos tomar otro datos objetivo: el de los ciudadanos que están en la UCI. Los datos de China, que por su gigantesco tamaño es una muestra perfecta para la Ley de los grandes números, muestra que alrededor del 5% de las personas diagnosticadas con covid-19 han necesitado cuidados intensivos. ¿La cifra en Madrid? Del 8,7% (490 casos entre los 5.637 oficiales). De nuevo, excesivamente alto. Pero, si volvemos a realizar la operación anterior, tomando el 5% de China como indicador, la cifra que vuelve a aparecer es la de 9.800 infectados. El resumen, es que además de encerrados estamos engañados.

Pedro Ruiz
Pedro Ruiz
Colaborador de MERCA2