¿Cuántas aerolíneas han conseguido remontar el vuelo tras un accidente aéreo? Pocas. El avión es el medio de transporte más seguro del mundo; sin embargo, cuando se produce un accidente aéreo los efectos son tan devastadores por el alto número de víctimas mortales que la compañía aérea queda tachada de por vida. Por ello, muchas desaparecen o quiebran con el aso de los años, mientras que otras se reconvierten en otra, como Germanwings diluida en Eurowings.
El 24 de marzo de 2015, un avión de Germanwings (propiedad de la alemana Lufthansa) se estrelló en los Alpes franceses con 150 ocupantes a bordo, mientras realizaba el trayecto entre Barcelona y Dusseldorf. Según la investigación uno de los pilotos, Andreas Lubitz, decidió suicidarse tras quedarse solo en la cabina, para lo cual dirigió el avión contra el suelo. En el siniestro falleció todo el pasaje, entre el que se hallaban 47 españoles y 72 alemanes.
El suceso copó la información de los medios de comunicación durante varias semanas por lo grave de los hechos. Fue, además, seguido desde varios países –los más afectados por las nacionalidades de las víctimas– con intensidad. De hecho, el accidente del vuelo GWI9525 de la aerolínea alemana cambió los sistemas de seguridad en el transporte aéreo.
Tras el accidente, la imagen y la seguridad de la aerolínea quedó en entredicho. Tanto que el grupo Lufthansa, matriz de la aerolínea, culmina una integración iniciada años atrás. Germanwings desaparece como marca y la nueva línea aérea sitúa su sede en Colonia bajo el logo y la marca de Eurowings. Los aviones también cambiaron su imagen y, de esta forma, desapareció para integrarse totalmente en la actual Eurowings.
Si bien es cierto, Eurowings ya existía. En 1997 se pone en marcha el departamento de low cost de Lufthansa con el nombre de Eurowings. Pero no es hasta octubre de 2002 cuando como resultado de diferentes movimientos empresariales, comienza a operar la aerolínea de bajo coste Germanwings. En 2013 y 2014, se produce la gran trasferencia de rutas de la línea de bandera alemana a Germanwings, que tiene como base el aeródromo de Dusseldorf. Un año después la integración con Eurowings es total.
En 2018, la red de aeropuertos de Aena transportó 263,7 millones de pasajeros. La aerolínea que más aumentó los pasajeros fue Eurowings. Esta registró 5,61 millones de pasajeros (+47,5%, es decir, 1,8 millones de usuarios más). Casi duplicó su tráfico en nuestro país. De tener una cuota de mercado del 1,5% en 2017 ha pasado a copar el 2,1% del sector aéreo español.
Casi cuatro año después del accidente, Eurowings realizó su apuesta más fuerte en España. La compañía aérea inició vuelos entre Fuerteventura y Düsseldorf, con dos frecuencias semanales; desde Mallorca a Fránkfurt y a Nuremberg, ambas con dos frecuencias semanales; entre Alicante y Sttutgart, con tres frecuencias a la semana, y Tenerife con Viena, con un vuelo a la semana. Eurowings vuela a 150 destinos en todo el mundo.
OTROS AEROLÍNEAS QUE DESAPARECIERON
El mundo de la aviación está lleno de ejemplos de aerolíneas que no pudieron volver a retomar el vuelo tras un accidente en alguno de sus trayectos. En España, el último fue el de Spanair. El 20 de agosto de 2008 el aeropuerto de Barajas vivía una de las peores catástrofes aéreas en España. El vuelo JK5022 de la ya desaparecida compañía aérea Spanair, con destino Gran Canaria, se estrelló en la pista 36L. Un total de 154 personas fallecieron en el accidente y solo 18 sobrevivieron.
Constituida en 1986, Spanair cesó sus operaciones el 28 de enero de 2012 tras entrar en concurso voluntario de acreedores. El accidente fue la puntilla a varios años de dificultades económicas que arrastraba la aerolínea.
Sin embargo, hay otras que si consiguieron continuar con sus operaciones. Un ejemplo de ello es KLM, quien protagonizó el peor siniestro de la historia de la aviación, conocido como el Accidente de Los Rodeos sucedió el 27 de marzo de 1977 y causó la muerte de 583 pasajeros. La otra aerolínea implicada, Pan Am, cesó operaciones en 1991.
