Evasión y derrota: la apuesta de TVE no despunta en prime-time

‘Supervivientes’ copa las noches de prime-time de Mediaset, Atresmedia ha apostado por un perfil bajo del que se salvó el estupendo especial ‘En primera línea’ y TVE fía sus noches al entretenimiento ligero.

Hace unas semanas se estrenó ‘Entre ovejas’, que ha llegado apadrinado por Raúl Cimas, Andreu Buenafuente o Baltasar Garzón. El show rural liderado por el joven pastor Zacarías Fievet ronda un pobre 6% de share en las noches de los viernes (la media de La 1 se sitúa en un 10%).

Datos más aseados alcanza ‘Masterchef’, que estrenó octava edición de anónimos senior ante un sobresaliente 20% de share. La pena es que al día siguiente esa audiencia huyó del primer canal de TVE: ‘Diarios de la cuarentena’ no alcanzó el 8%.

‘DIARIOS DE LA CUARENTENA’ EN TVE

La sitcom protagonizada por Carlos Bardem, Gorka Otxoa, Carlos Areces, José Luis García Pérez, Adriá Collado, Fernando Colomo, Víctor Clavijo, Cristina Alarcón, Fele Martínez, Montse Plá, Mónica Regueiro, Carmen Arrufat, Petra Martínez, Juan Margallo y Cecilia Gesse llegó con polémica por la campaña contraria de la derecha mediática.

En La 1 de TVE, que siguen terceros a pesar de los estrenos, han intentado contrarrestar los palos a base de desvelar que televisiones de Francia, México, Estados Unidos, República Checa y Sudáfrica se han interesado por los derechos.

HBO ha apostado por un producto similar. La OTT ha encargado ‘En casa’, que será una serie de cinco piezas de quince minutos firmadas por Leticia Sabater, Rodrigo Sorogoyen, Paula Ortiz, Carlos Marques y Elena Martín.

LÍO EN ATRESMEDIA

En Atresmedia están más pendientes de la refriega política que del prime-time después de que la diputada Macarena Olona (Vox) denunciase «el ‘ministerio de la Verdad’ que han creado de manera paraestatal y en el que empresas destacadas Newtral y Maldita, es decir, el señor Ferreras, la señor Pastor o el señor Roures; son la Gestapo que vigila la verdad oficial».

Antonio García Ferreras le ha contestado desde el programa ‘Al rojo vivo’ de La Sexta: «Es mentira: Whatsapp y Facebook no están monitorizados por ninguna empresa española para censurar contenidos políticos».

«Miente y lo sabe la ultraderecha, la extrema derecha, pero es su estrategia: la mentira, la manipulación, los bulos, los fakes y, sobre todo, mucho odio. No nos van a intimidar ni el odio ni la mentira. Es un honor hacerle frente a todo eso, sobre todo si viene de parte de la extrema derecha pseudofascista de este país, que desgraciadamente es la tercera fuerza política», añadió.

ATRESMEDIA SALE AL QUITE

El grupo audiovisual ha rechazado Atresmedia su «rechazo total y absoluto a las manifestaciones realizadas hoy en el Congreso por la Diputada de Vox Macarena Olona en las que señala, entre otros, a dos destacados profesionales de esta casa como ‘la Gestapo que vigila la verdad oficial'».

«Atresmedia considera inadmisibles e injustificables -especialmente en una representante pública y en sede parlamentaria- estas manifestaciones, y quiere dejar claro que no está dispuesta a dejar pasar por alto ningún ataque al trabajo de sus profesionales de la información», explican.

Y aseguran que «cada uno de esos ataques, que se vienen sucediendo en las últimas semanas desde la misma formación política a la que pertenece Macarena Olona, supone un atentado a la libertad de información y de expresión de los medios de comunicación, que están realizando una labor social necesaria e indispensable durante esta crisis».

FAPE SALE EN DEFENSA DE ATRESMEDIA Y DE TVE

La Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) rechazó «el ataque de Vox a periodistas y medios de comunicación públicos y privados, en lo que supone un intolerable intento de coartar el libre ejercicio del periodismo para evitar la rendición de cuentas sobre sus decisiones y actuaciones a la que está obligado como partido parlamentario».

«Al mismo tiempo, la FAPE respalda la labor de verificación de los hechos que están haciendo medios y empresas especializadas, de acuerdo a los principios deontológicos del periodismo. Su tarea es esencial para frenar la avalancha de bulos y montajes sobre la pandemia y que obedece a objetivos espurios, por lo que rechazamos cualquier intento de intimidación o amenaza, proceda de donde proceda», continúan.

Y añaden: «La FAPE anima a los medios y a los periodistas que apuestan por la información veraz, verificada y contrastada, a luchar sin descanso contra las estrategias de desinformación que tratan de aprovechar la crisis para fomentar el miedo, la crispación y el odio, en una escalada que atenta contra valores fundamentales del sistema democrático».

También la FAPE «deplora que algunos periodistas se hayan apuntado a la descalificación de otros colegas y no duden en recurrir al insulto y a la mentira para azuzar la bronca. A los ciudadanos no les interesa para nada las peleas entre periodistas, solo les preocupa que, como servicio esencial, hagamos bien nuestro trabajo para tomar sus propias decisiones con el mayor conocimiento posible de los hechos«.