Con respecto al cigarrillo electrónico, hay diversidad de opiniones sobre si es perjudicial o no para la salud. No obstante, sí es cierto que cualquier cosa que tenga sustancias tóxicas o adictivas, demasiado bueno no debe ser.
El gran problema que tiene la práctica del vapeo es que no lleva el tiempo necesario en el mercado como para existan estudios fehacientes que indiquen lo que les sucede a sus consumidores habituales en una línea cronológica extensa.
Al igual que sucedió con el tabaco convencional años atrás, no será hasta dentro de algún tiempo que comenzarán a dar la cara los verdaderos efectos secundarios de los cigarrillos electrónicos.
No sirve para dejar de fumar
Son muchas las personas que han decidido dejar el tabaco tradicional por el cigarrillo electrónico con la finalidad de abandonar el tabaco definitivamente.
No obstante, se ha demostrado en este corto periodo de vida en el que dicho producto está en el mercado, que lo único que puede llegar a conseguir es que uses líquidos sin nicotina, pero el costumbrismo de tener algo en la mano lo sigues teniendo y el de echar humo también.
Cuando decides dejar de fumar debes ir al médico para que te mande un tratamiento farmacológico junto con unas terapias especiales. Un fumador tiene muy pocas posibilidades de dejar el hábito del tabaco por sí solo y si continúa con el cigarrillo electrónico el índice de recaída es enorme.
