Los platos rotos de Cataluña: ¿cuál es el costo de la crisis para España?

María Tadeo para Bloomberg

La economía de España tendrá que pagar tarde o temprano el precio por la apuesta de Cataluña por su independencia.

Mientras el presidente Mariano Rajoy ha intervenido para hacerse cargo de la región, las próximas elecciones catalanas podrían ser otro punto álgido para el movimiento independentista de la región. Para Oxford Economics, eso significa una persistente incertidumbre, cuestión que representa un riesgo para la sensibilidad, los precios de las acciones y los bonos.

En el peor de los casos, el crecimiento económico de España sería más débil y la economía sería 17.000 millones de euros menor en 2019 de lo que hubiera sido de otra forma. Esa visión adversa -no hay proyección central de Oxford- supone un incremento permanente en los rendimientos de los bonos de al menos 50 puntos básicos y una disminución del 10% en las acciones para los años 2018 y 2019 en comparación con su escenario base.

El índice bursátil español IBEX 35 ha caído 3,5% desde finales de septiembre

“El impacto económico de la crisis de independencia catalana aún se desconoce, pero el aumento de las tensiones políticas ya ha provocado que la incertidumbre alcance los niveles más altos en más de una década”, de acuerdo con el economista de la zona euro, Ángel Talavera.

La crisis catalana estalló el 1 de octubre cuando el gobierno regional anterior celebró un referéndum ilegal sobre la independencia que afirmó como un mandato para declarar la independencia de España. Rajoy respondió invocando poderes constitucionales para disolver el gobierno regional de Cataluña, disolver su parlamento y convocar elecciones regionales para el próximo 21 de diciembre.

Mientras cientos de compañías, lideradas por el CaixaBank, están en labores de trasladar su sede legal fuera de Cataluña, el ministro de Economía, Industria y Competitividad de España, Luis de Guindos, advirtió que la crisis afecta tanto a la economía catalana como a la española. El índice bursátil español IBEX 35 ha caído 3,5% desde finales de septiembre, mientras que el diferencial de la deuda española a 10 años respecto a los bonos alemanas poco ha cambiado.

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El análisis de Oxford Economics también tiene en cuenta el denominado índice de incertidumbre de la política económica, que mide el número de artículos periodísticos que contienen la palabra “incertidumbre” o términos relacionados en los principales periódicos de España como un indicador de riesgo político. La conclusión alcanzada excedió los niveles históricos en 2016, cuando España luchaba por formar un gobierno y la confianza de las familias y las compañías sufrirá si los niveles siguen siendo altos, de acuerdo con Talavera.

Aún así, su caso base sigue siendo que el impacto económico de la crisis catalana es limitado, con un crecimiento del 2,6% previsto para el próximo año y otro 2,4% en 2019. Su escenario adverso de una prolongación de la crisis en Cataluña causaría que el crecimiento económico sea más débil, alrededor del 1,5% anual, para luego recuperarse y anotarse 2%.