Todo lo que debes saber para cambiar tu coche gasolina o diésel en eléctrico

No sabemos qué nos depara el futuro, pero consideramos que los coches eléctricos son una tendencia que acabará restando importancia a los coches diésel o gasolina. ¿Te lo has planteado, conoces ya las ventajas de los coches eléctricos, sabías que puedes convertir tu viejo coche en uno eléctrico?

Si tienes un clásico, un coche al que tienes mucho cariño o no puedes asumir el coste de un nuevo coche eléctrico, debes saber que puedes convertir tu coche en uno eléctrico.

Las razones para tener un coche eléctrico pueden ser muchas, desde evitar las restricciones de tráfico en las ciudades, que te mueves mucho por ciudad, conciencia medioambiental y cualquier otra.

Hay muchas personas que desconocen esta posibilidad, y ni siquiera se les pasaría por la cabeza pensar que su viejo coche podría ser un coche eléctrico. Esta posibilidad es legal en España e incluso hay empresas que se dedican a ello a un precio más bajo de lo que supondría comprar un coche eléctrico nuevo.

El concepto se llama retrofit, y el trabajo es algo laborioso y especializado. El retrofit está basado en la conversión de vehículos de diésel o gasolina en híbridos o eléctricos que se adaptan a circular por las ciudades.

Transformar tu coche diésel o gasolina en uno eléctrico paso a paso

coche pequeño convertible

Hay compañías que te ofrecen la posibilidad de cambiar tu coche a uno eléctrico. La duración del proceso dependerá de si ya tienes los elementos mecánicos nuevos de tipo eléctrico: controlador, motor, baterías, placa para adaptar el motor a su caja de cambios, conectores, cables, fusibles y más.

No es tan sencillo como parece, por ello es importante que te plantees confiar en expertos en talleres certificados. Pero también te debes plantear esto por el tema de las homologaciones, porque si no tendrás problemas. Puedes encontrarte con mecánicos que te digan que no puede ser tan difícil o que creen saber hacerlo, pero lo mejor es que cuentes con profesionales especializados en retrofit.

Los profesionales empezarán a quitar todos los elementos relacionados con la mecánica gasolina o diésel de tu coche. Después procederán a instalar el nuevo motor, el cableado, la batería y todos los elementos. El paso final es comprobar y probar que todo funcione correctamente.

Se trata de un proyecto de reforma firmado por un ingeniero que estipule que los nuevos elementos que se incorporen al coche sean los adecuados, y que se monten de forma corriente. La homologación es imprescindible para hacerlo correcta y legalmente.

Una de las dificultades que te encontrarás en el proceso pueden ser las homologaciones. Hay dos organismos en España que se ocupan de eso: IDIADA e INTA.

Después de esta homologación has de pasar la ITV, en la que determinarán que todo funciona correctamente y si no tienes que reparar o cambiar nada en el coche.

En una jefatura de Tráfico te darán la nueva documentación de tu vehículo, con la etiqueta medioambiental correspondiente.