Calentador de gas o eléctrico: ¿cuál es mejor?

Si estás pensando cambiar el calentador, seguramente estarás dudando acerca de cuál es mejor, si el calentador de gas o eléctrico. Nuestro objetivo en esta ocasión es el de ayudaros a que toméis la decisión más acertada para que cubra vuestras necesidades por completo, y por ello hemos consultado con los profesionales de https://unasensacionperfecta.es, que nos han ayudado a llegar a una conclusión lo más acertada para cada uno de ellos.

Conoce las ventajas e inconvenientes del calentador de gas

Vamos a empezar conociendo cuales son las ventajas e inconvenientes del calentador de gas con respecto al eléctrico.

Ventajas del calentador de gas

Una de las ventajas más interesantes del calentador de gas es el hecho de que no nos tenemos que preocupar del límite de agua caliente que podemos utilizar.

Mientras que los calentadores eléctricos cuentan con un depósito que, conforme vamos gastando, tiene que volver a calentar, en el caso del calentador de gas esto no es así, ya que vamos a poder obtener absolutamente toda el agua caliente que queramos sin interrupción.

Esto hace que sea ideal para aquellas viviendas en las que no tenemos muy claro si por temporadas vamos a aumentar de forma considerable la necesidad de agua caliente.

Además, también supone un ahorro muy considerable con respecto al eléctrico, ya que el gas tiene un precio mucho más económico, y una simple bombona nos puede llegar a durar mucho tiempo.

Inconvenientes del calentador de gas

Si no instalamos un buen calentador, cuando varias personas solicitan agua caliente en la misma instalación, hará que salga más fría que si tan sólo la está solicitando un único grifo.

Además, también hay que realizar revisiones periódicas con el objetivo de comprobar que la instalación se encuentra en perfectas condiciones, de manera que podamos evitar riesgos innecesarios.

Descubre los aspectos a favor y en contra del calentador eléctrico

Y por supuesto, también vamos a tener en cuenta las ventajas e inconvenientes del calentador eléctrico.

Ventajas del calentador eléctrico

Su instalación es más sencilla puesto que en lugar de una instalación de gas, tan sólo necesitamos una toma eléctrica para enchufarlo.

Obtendremos agua caliente al instante, y siempre y cuando no agotemos su contenido, la temperatura del agua se mantendrá aunque encendamos varios grifos a la vez.

No es necesario realizar revisiones periódicas como ocurre con el calentador de gas.

Inconvenientes del calentador eléctrico

Se trata de un depósito en cuyo interior hay agua, la cual se calienta a través de una resistencia.

Esto significa que en el momento en el que agotemos el agua del depósito, entrará agua fría que se deberá calentar de nuevo, lo cual requiere un cierto tiempo.

Esto lo hace menos recomendable en los momentos en los que existe una gran demanda de agua caliente por ejemplo cuando vienen familiares o amigos, siempre y cuando esté por encima del cálculo que generalmente es de 50 l de agua caliente por persona y día.

Ocupan un mayor espacio y, quizás la pega más destacada de este tipo de calentadores es el hecho de que la energía eléctrica es más cara que la energía que obtenemos a partir del gas, por lo que, dependiendo del uso que vayamos a hacer de él, puede suponer un gasto adicional a final de mes.

En definitiva, elegir entre un calentador de gas y un calentador eléctrico va a depender de nuestra demanda, de nuestras necesidades, y por supuesto también de dinero que queramos gastar en agua caliente sanitaria.