El BdE advierte que la descarbonización traerá riesgos para la banca

La subgobernadora del Banco de España, Margarita Delgado, ha indicado este jueves que España ha asumido el compromiso de la Comisión Europea de lograr la descarbonización total de la economía en el año 2050. Este reto se calificó de «mayúsculo» y se advirtió que las entidades bancarias tendrán que asumir riesgos como «facilitadoras del cambio».

Delgado, que participó en las jornadas organizadas por ‘El Confidencial’ sobre ‘Descarbonizar la economía‘, indicó que la evolución hacia una economía descarbonizada implica un cambio del modelo productivo y dicho cambio tiene «implicaciones sistémicas», afectando particularmente a determinados sectores económicos.

Por todo ello, afirmó que es preciso llevar a cabo este proceso de un modo «cuidadoso y gradual» para «minimizar» las consecuencias económicas y sociales «indeseadas». En este contexto apuntó que la banca «tiene que jugar un papel importante como facilitador del cambio», pero también tendrá que asumir algunos riesgos al respecto.

Afirmó que el proceso de transición energética de la economía española implicará para las entidades financieras «riesgos físicos», provocados por los efectos directos del cambio climático, pero también los «riesgos de transición«, referidos a las medidas regulatorias encaminadas a transformar de modo sostenible la economía, así como la evolución en el comportamiento y preferencias de los clientes motivados por una mayor concienciación medioambiental.

De esta forma, Delgado advirtió de que en el pasado la economía española se ha enfrentado a otras transiciones y se pueden encontrar ejemplos de compañías «solventes y fuertes» que han perdido su posición de liderazgo, «o incluso desaparecido», en un plazo de pocos años al no haberse sabido adaptar a un cambio tecnológico o de comportamiento del consumidor.

CAMBIOS NORMATIVOS

A pesar de que el objetivo de descarbonización completa de la economía se ha fijado para 2050, un plazo «razonablemente largo», Delgado afirmó que el logro de este objetivo implicará necesariamente cambios normativos y estructurales en la economía, que afectarán a determinados sectores de actividad, y también cambios en el comportamiento de la ciudadanía, que en la práctica pueden anticipar cambios normativos.

En el caso concreto de la banca, señaló que a pesar de que las actividades contaminantes presentan una menor tasa de morosidad bancaria, las entidades bancarias deberán incorporar los riesgos climáticos en coste y capital al abaratar la financiación de aquellas actividades que contribuyen más a la transformación sostenible de la economía, a la vez que se desincentivan las actividades más contaminantes.

También se refirió al nuevo mercado de bonos verdes, cuyo aumento de la demanda es un indicio de la creciente preocupación que existe por los efectos del cambio climático. Según Delgado este cambio de actitud entre los inversores es un elemento que debería actuar como «catalizador» del cambio hacia actividades más sostenibles.

ENCUESTA DEL BANCO DE ESPAÑA

En este contexto, Delgado aseguró que los supervisores tienen la responsabilidad de «fomentar» estos cambios y, en particular, abogó por entablar un diálogo con las entidades para analizar cómo están incorporando los riesgos medioambientales. Así, indicó que el Banco de España ha realizado una encuesta entre las 12 entidades bajo supervisión del MUS, además de otras entidades de menor dimensión, cuyos resultados se han discutido con dichas entidades.

De acuerdo con estos resultados, muchas entidades ya contemplan este riesgo de un modo explícito y otras han tendido a incluirlo dentro de sus áreas de responsabilidad social. Además, casi todas tienen un equipo dedicado exclusivamente a las finanzas sostenibles y algunas cuentan con comités específicos.

No obstante, la subgobernadora advirtió de que muy pocas entidades disponen de procesos y herramientas para la identificación, medición y gestión de este tipo de riesgos, por lo que afirmó que el objetivo de los supervisores a corto plazo es que casi todas las entidades incorporen la dimensión medioambiental en sus estrategias.

DOCUMENTO SOBRE BANCA Y MEDIOAMBIENTE

Para conseguir este objetivo, el Banco de España está trabajando en la elaboración de un documento reflejando todas estas expectativas supervisoras y confía en poder publicarlo pronto para consulta. Al mismo tiempo, quiere extender el diálogo de estos temas a otros agentes, como las firmas auditoras, y está organizando jornadas y talleres para discutir desarrollos metodológicos al respecto.

También a nivel interno, estos temas implican cambios en el propio Banco de España y para ello la institución está evaluando su impacto en el medioambiente, con objeto de articular y coordinar las medidas encaminadas a reducir dicho impacto. De esta forma debe ser capaz de evaluar las exposiciones de las instituciones financieras a las actividades con altas emisiones de carbono, realizar ejercicios de estrés para el sistema en su conjunto o definir escenarios y metodologías que deban aplicar las entidades de modo individual.