ArcelorMittal quiere usar drones pero que los pague papá Estado

Los datos de la multinacional ArcelorMittal en los nueve primeros meses del año son más que satisfactorios: su ebitda fue de 3.814 millones de dólares, y el resultado neto de 3.956 millones. “Los avances logrados por la industria y por nuestra empresa son sustanciales, pero seguimos siendo conscientes de los retos”, dijo su presidente, Lakshmi N. Mittal, en una nota informativa.

¿Cuáles son esos retos? La sobrecapacidad existente a nivel mundial, el elevado nivel de importaciones en ciertos mercados, la caída de la demanda (se prevé sea del 1,8% en 2018 y del 0,7% en 2019), el conflicto comercial entre EEUU y China… Eso de puertas afuera, pero ¿de puertas adentro?

“En la empresa vamos a necesitar de grandes inversiones. El punto desde el cual partimos no es el mismo que el de las empresas chinas. Estamos dos pasos por detrás”, indicó Susana Peregrina, responsable del Centro de I+D de ArcelorMittal en el País Vasco y coordinadora de Platea (Plataforma Tecnológica Española del Acero).

ArcelorMittal quiere implantar robótica, algoritmos de inteligencia artificial, y estudiar la aplicación de nuevos materiales

Dichas palabras fueron pronunciadas durante la celebración del 50 cumpleaños de Unesid, la patronal de las empresas siderúrgicas. Un acto en el que la representante de ArcelorMittal indicó que “hay que cambiar todo”. Y ahí enumeró desde la utilización de drones y robótica, la predicción de la demanda gracias al uso de algoritmos de inteligencia artificial, la generación de nuevos materiales… ¿Factible? “No tenemos financiación”, se lamentó. ¿Solución? “Hay que potenciar la colaboración público-privada”. Papá Estado siempre dispuesto a ayudar.

ARCELORMITTAL Y LAS PUERTAS ABIERTAS DEL MINISTERIO

Se llama Plan Reindus, consta de 400 millones de euros, y lo que pretende el Gobierno (a través del ministerio dirigido por Reyes Maroto) es impulsar la reindustrialización en España. Un dinero que, entre otras cosas, se dedicará a la adquisición de activos fijos industriales, y a la modernización o adaptación de las líneas de producción.

Toda una puerta abierta para acometer esos planes que tiene en mente ArcelorMittal para la utilización de tecnologías punteras y disruptivas. “Queremos generar procesos que tengan un impacto medioambiental menor”, subrayó Susana Peregrina. Así, respecto a la contaminación del aire, pretenden buscar sinergias con otros sectores que ya han puesto en marcha soluciones al respecto y ver su posible utilización.

Respecto a la energía, la representante de ArcelorMittal consideró “crítico poder valorizar nuestros gases. Para ello necesitamos una tecnología que todavía no hemos encontrado. Nuestro talón de Aquiles es gestionar la pérdida de calor”.

[td_block_11 custom_title=»» separator=»» post_ids=»87272″ limit=»1″ css=».vc_custom_1496993590403{border-top-width: 1px !important;border-right-width: 1px !important;border-bottom-width: 1px !important;border-left-width: 1px !important;padding-top: 5px !important;padding-right: 5px !important;padding-bottom: 5px !important;padding-left: 5px !important;border-left-color: #000000 !important;border-left-style: solid !important;border-right-color: #000000 !important;border-right-style: solid !important;border-top-color: #000000 !important;border-top-style: solid !important;border-bottom-color: #000000 !important;border-bottom-style: solid !important;border-radius: 4px !important;}» tdc_css=»»]

Otro campo en el que tienen puesto el punto de mira es el de la digitalización. Necesitan que el internet de las cosas sea real. “La tecnología funciona bien en los laboratorios, pero en entornos como el nuestro necesita desarrollo y trabajo”, puntualizó.

Y como de papá Estado se pueden conseguir no sólo apoyo económico, Susana Peregrina demandó apoyo legislativo: “No se puede producir hojalata con cromo pero sí se puede importar. Tienes que hacer una inversión pero tu cliente la puede comprar a China que no tiene esa cortapisa. La asimetría en la legislación puede ser un problema. Tenemos poco margen de maniobra”.

Demasiados frentes abiertos en el campo de la innovación para los que se requiere una gran inversión. Sin embargo, la media del sector siderúrgico en cuanto a inversión en I+D es tan solo del 1% de la facturación. ArcelorMittal tendrá que rascarse el bolsillo para conseguir sus metas.