El pasado 4 de diciembre los Reyes de España participaron en la fiesta del cincuenta aniversario del Diario AS. En este evento se dejaron ver en el Ayuntamiento de Madrid también Juan Luis Cebrián y Alfredo Relaño, pero no hubo rastro de Florentino Pérez y de ninguna estrella del Real Madrid, síntoma del divorcio público entre el presidente del Grupo ACS y el diario deportivo de Prisa.
En esa concurrida noche hubo momentos de recuerdo para las principales gestas del deporte español en el último medio siglo, recogidos por AS desde aquel lejano 67 gracias al impulso de la familia Montiel, que aprovechó que El Alcázar dejaba de imprimirse en sus rotativas para resucitar un diario que compartía nombre con un semanario deportivo que vivió momentos de gloria en el Madrid republicano.
Luis González Linares, director de Semana (que dejó la información sobre espectáculos para centrarse en el colorín) pondría en pie AS y también intentaría regatear la férrea Ley franquista que exigía el descanso semanal del periodismo con el nacimiento de por aquel entonces novedoso AS Color.
AS cayó en el año 96 en manos de Alfredo Relaño, hombre elegido por Prisa tras su impecable currículum como ensayista en la recordada sección deportiva de El País en la Transición, tras haber demostrado poder saber llevar los galones al reclutar como jefe de deportes de la SER reclutando a un grupo de jóvenes heterogéneos que destronarían a SuperGarcía años después, y tras haber combinado con acierto los elementos más novedosos y castizos del deporte en los deportes del Plus, con la realización futbolera de Víctor Santamaría y «Lo que el ojo no ve» de ‘El día después’ en la retina.
Relaño supo combinar la tradición popular del fútbol madrileño de los cincuenta con elementos de alto periodismo, persiguiendo también la influencia. Compensó su diferencia de ventas y estructura con el mastodonte Marca achicando espacios gracias a las sinergias radiofónicas y televisivas que le proporcionaba aquel líder de la información que era por aquel entonces Prisa.
Sobrevivió AS a la crisis mejor que El País, volcó el contenido del papel en la red cuando muchos aventuraban suicidio, abrió ediciones digitales en Chile, Colombia, México o Miami (Arabia llegará en 2018), y logró batir el récord histórico de ventas del periódico gracias al «Iniestazo» de Sudáfrica, que logró dejar atrás las marcas del triunfo de Urtain frente a Weiland y del mítico 12-1 a Malta.
Pero también ha tenido sinsabores Relaño en su trayectoria, en especial el éxodo de la estructura de los deportes de la SER a COPE, amén de las ventas de Prisa de Cuatro o Canal + para salvar los muebles del holding. Aun así el periodista es famoso a nivel de calle por su guerra abierta contra Florentino Pérez, que le llevó a los tribunales por haber publicado a una entrevista a Gay de Liébana en la que el economista dibujaba paralelismos entre los fichajes galácticos merengues y los supuestos pelotazos de ACS por medio mundo. José Antonio Abellán, al que durante años se le consideró cercano al presidente blanco, atribuía a Florentino estas palabras en su libro ‘Asalto al Real Madrid’: «Relaño está en el lado de mis enemigos. Relaño a mí me odia. Por lo que quiera, por lo civil o por lo militar… porque soy presidente del Madrid por segunda vez en contra de su voluntad. Eso es así».