Airbus promete permanecer en Reino Unido tras Brexit

El máximo responsable de Airbus, Tom Enders, prometió personalmente al gobierno británico que la empresa planea continuar sus operaciones en ese país “por un período largo en el futuro”, en lo que representa un giro del acérrimo detractor del divorcio con la Unión Europea.

Enders plasmó su promesa en una carta enviada este mes al secretario de Negocios, Greg Clark, según un cargo, quien declinó ser identificado debido al carácter privado del documento. La carta es un hecho relevante dado lo crítico que ha sido Enders hasta hace poco, condenando el Brexit como una amenaza para la industria.

Enders escribió que el gigante aeroespacial continuaría viendo al Reino Unido como “su país de origen y un lugar competitivo para invertir”.

La referencia a “país de origen” es una señal a los 15.000 empleados británicos de la empresa. El estatus da a las divisiones nacionales de Airbus prioridad e influencia en las decisiones de producción y estratégicas.

La carta coincide con la cada vez mayor incertidumbre entre los productores de manufacturas británicos por los posibles efectos del Brexit, incluida la posibilidad de perder acceso a trabajadores europeos capacitados, y un aumento de controles aduaneros. Un portavoz de Airbus en Reino Unido no pudo responder de inmediato a las preguntas enviadas tras la jornada normal de trabajo.

Ayuda a May

El respaldo de Enders llega en buen momento para la primera ministra Theresa May y refuerza sus argumentos de que su acuerdo para el Brexit no pondrá en peligro los empleos británicos.

La carta de Enders también podría levantar dudas sobre si fue una respuesta a cambios en el acuerdo de financiamiento, que Airbus negoció por primera vez hace dos décadas con varios países, incluido Reino Unido, y que le permitió desarrollar el jumbo A380. El fabricante de aviones dijo el miércoles que las obligaciones futuras por los adelantos reembolsables cayeron en más de US$1.400 millones, con el grueso del descuento como resultado de la revisión de las proyecciones para el A380 y negociaciones para reestructurar el acuerdo.

“Estabilidad”

La carta hablaba de proveer “estabilidad de planificación” para miles de empleados que trabajan en el programa A380 y en las fábricas de Airbus en Broughton, ubicada en el norte de Gales, y Filton, cerca de Bristol, que se describen entre las más productivas.

Airbus emplea 6.000 personas en Broughton y otras 4.000 en Filton. Al menos siete países han visto el Brexit como una oportunidad para arrebatar a Reino Unido su dominio de cinco décadas en la construcción de alas para Airbus, apostando por lograr una participación de su trabajo de producción de alto valor y precisión.