Ayudas directas, formación, préstamos a clientes y otros programas de apoyo al sector como el impulso y creación de herramientas digitales. Estos han sido los pilares que ha impulsado Heineken bajo el epígrafe ‘fuerza bar’ y que se ha traducido en una inversión superior a los 150 millones de euros durante 2020.
Todo arrancó con la aportación por parte de Heineken de más de 21 millones de productos gratuitos para que la hostelería retornara a su actividad después de haber estado cerrada desde mediados de marzo hasta junio. O las ayudas directas a los empleados (250.000 euros) para que lo gastaran en hostelería. “Se trata de un movimiento que está en continua evolución. De ahí que estas ayudas no van a ser las únicas”, afirma Manuel Román, director de Ventas y Distribución a Hostelería de Heineken España.
Por eso, y de cara a 2021, en Heineken pretenden repetir la experiencia. “La línea de ayudas irá conforme al año pasado. En términos presupuestarios no lo sabemos todavía, pero la ayuda a clientes y distribuidores es irrenunciable”, indica Manuel Román. Y añade: “Hay ayudas que han funcionado muy bien y otras no tanto. Seguiremos innovando y buscando soluciones”.
AÑO DE TRANSICIÓN PARA HEINEKEN
Como para otras cerveceras, Heineken ha definido 2021 como un año de transición. La evolución dependerá de cómo se vaya desarrollando la propia pandemia, de las medidas que se vayan adoptando tanto en el gobierno central como en los autonómicos, y de la reacción de los clientes una vez que las medidas hagan que todo vuelva a ser como antes.
También habrá que tener en cuenta la situación de la propia hostelería que, según estadísticas, puede ver perder un tercio de sus establecimientos. Sin olvidar la crisis económica que camina de manera paralela a la crisis sanitaria. Sin olvidar los apoyos, en forma de ayudas que, de momento, están a años luz de las ofrecidas en otros países de nuestro entorno.
Heineken no está siendo ajeno a esta situación. Y aunque durante 2020 no llevó a cabo un ERE, en 2021 ha llegado a un acuerdo con los sindicatos para que sean 288 las personas que salgan de la compañía vía prejubilaciones. Se trata de un recorte del 14,3%. Salidas que afectarán de manera transversal a los cuatro centros de trabajo y áreas de la compañía.
Un acuerdo en el que también se ha acordado preservar el nivel salarial del personal, reducir las aportaciones al plan de pensiones de manera temporal, a la par que los incrementos salariales irán ligados a la recuperación del mercado cervecero.
Más allá de las ayudas económicas, Heineken seguirá apoyando Talento Cruzcampo, donde la formación, la profesionalización y la orientación forman parte de su idiosincrasia. Generar oportunidades de empleo para los jóvenes, en resumen.
