El Gobierno deja que la guerra de taxistas y VTC viva sin sanciones

La lucha encarnizada entre taxistas y Vehículos con Conductor (VTC) no es nueva. Este tira y afloja trae un nuevo capítulo: el gremio del taxi continúa a la espera de que el nuevo Gobierno recupere la tramitación de la reforma de la Ley de Ordenación de los Transportes, “nadie nos ha dado una respuesta y se limitan a decirnos que está parado”.

Según han informado a MERCA2 fuentes del sector del taxi, es “un descalabro” el poco control del servicio del VTC a lo largo del año y aseguran que una de cada cuatro inspecciones termina en sanción. En 2019, se realizaron unos 11.000 controles, una cifra “muy baja que no representa ni al 1% del sector”.  

De hecho, desde el sector del taxi exigen una mayor formación para la Policía Municipal con respecto a la normativa reguladora de los VTC. Señalan que los agentes necesitan unas horas de formación específica, porque no conocen bien el baremo sancionador o cuestiones como si la hoja de ruta puede ir en formato digital, etc.

Además, critican que existe una alta tasa de infracción por parte de los VTC, en torno al 25% en Madrid, una cifra algo inferior en Andalucía, que se mantiene en el 20%, pero aun así son “cifras alarmantes. Lo que se reclama es aumentar el control sobre estas empresas y, sobre todo, fomentar la pericia de los agentes para detectar mayor número de infracciones.

INFRACCIONES DE LOS VTC

De este modo, reclaman que se realicen controles en las propias empresas de VTC, para verificar que se rellenan la totalidad de las hojas de ruta y se cumplen los días de descanso de los conductores, tal y como exige la Ley.

Por otro lado, fuentes del sector aseguran que las empresas VTC ofrecen empleo precario y, por tanto, hay mucha rotación. De hecho, lamentan que estos empleados no están formados y no saben cómo se rellena una hoja de ruta ni graban todos sus servicios.

En cuanto a la precontratación del servicio, en el caso de Barcelona existe la obligación de que pasen 15 minutos desde que se contrata el vehículo hasta que se recoge al usuario, una medida que no se cumple, según fuentes del sector.

CRUZADA EN EL TAXI

Pero no hay que irse muy lejos para ver la disputa, sino que dentro del gremio de los taxistas hay posturas enfrentadas y no tienen intención de acercar opiniones. Esta cruzada les mantiene enfrentados y no se ponen de acuerdo ni a la hora de reclamar sus derechos.

De hecho, fuentes del taxi critican que para exigir responsabilidad sobre la tramitación de la reforma que regula la Ley de Ordenación de los Transportes “unos 100 taxistas se concentran frente al Ayuntamiento de Madrid, en vez de pedir explicaciones a Ábalos. Llevan grabado a fuego la frase I hate Garrido”. Y aseguran que 112 taxistas no representan la opinión de más de 15.000 profesionales.

Tampoco se ponen de acuerdo en la cuestión de ofrecer un precio cerrado al usuario antes de iniciar el trayecto. Para algunos taxistas esto es “indecente”, pero para otra parte del sector sería un valor añadido y fomentaría el mayor uso del taxi frente a los VTC.

TAXIFICACIÓN

Una de las controversias es si pueden aparcar o no los VTC en la vía pública. Para unos taxistas no deberían pararse, pero para otras plataformas del taxi sí que está permitido que estacionen, pero sin geolocalización para fomentar su servicio.

Algunas plataformas del taxi apoyan la taxificación, que supone una regulación más intervencionista con condiciones más parejas a las del taxi. Apuestan por la modificación de la ordenanza del taxi y que surja la posibilidad del taxi compartido y del precio cerrado.

Otra medida que apoyan es la flexibilidad del servicio para tener la posibilidad de poder salir toda la flota en fiestas o días de máxima afluencia. “Queremos libertad para salir, y ya luego que cada taxista elija si prefiere quedarse en casa o no”.

Por otro lado, fuentes del sector aseguran que plataformas como Uber o Cabify practican la elusión fiscal, que no la evasión. De este modo, “buscan pagar lo menos posible y al margen de la ley. No pagan a las arcas españolas, se van a Holanda y de ahí a Panamá”.

VTC

Como en todas las guerras, existen dos versiones de un mismo hecho. Y en este caso no va a ser diferente. Desde la asociación mayoritaria del sector VTC en España, Unauto VTC, defienden que cumplen “escrupulosamente” con las hojas de ruta, que deben conservar durante un año como marca la Ley.

Además, insisten en que “en el futuro cabemos todos” y lo demuestra con el aumento de demanda de servicios de VTC: “la unión de Administración, taxis y VTC es más necesaria que nunca para garantizar un servicio de movilidad sostenible, de calidad y competitivo a nivel global”.